"Llámame si me necesitas"
Hay cactus que huelen tan exquisito que son granadas para el corazón. Existen los lunes y existen los viernes, es cuestión de sobrellevar el impacto y superar la diferencia. El hedor de los días es escalofriante, pero al mismo tiempo es intrépido. La vida en sí misma tiene el valor específico de vivirla, con vos o sin vos, con aceleración o en retaguardia, estructurada, emocionada, extasiada o asediada, pero inquieta por vivir y resistir. La humedad en los segundos es constante, la vibración en las horas es necesaria, ¿es cuestión de tiempo o de un final que esto pase, o que se anime a concretarse?