Es un hecho.
A ver...En el Colegio 24 trabajan Marta Chávez y Tatiana Sánchez. El nombre de una y el apellido de otra hacen el nombre completo de Marta Sánchez. Con la locura infinita que me sucede en la mañana (es muy temprano), saqué junto a Pao e Iván esas conclusiones. No sé si tiene que ver con las vueltas de la lógica, o con los encuentros clandestinos de las casualidades, pero es como que las fechas, los números y las palabras últimamente se erizan suavemente entre ellas, abrazándose y deslizando por el mundo sus deseos de subsistir. Y claro, un día de octubre, un mes de mayo, un tipo de letra, un número ocho (número de la suerte de mamá y apropiado por mí hace años)...son demasiados principios conspirando a favor de la numerología. Este Puerto Deseado ignoto y rebuscado, se ha detenido en una nube. Ayer, en el Inset, aceleré mis demostraciones poéticas. A veces pienso que no puedo seguir con este trajín existencial, de redes sociales y latidos. No cocino, apenas como y se siente el can...